Perdí la cuenta de los post que he publicado sobre elecciones en Venezuela, sin duda que algunos de esos post reflejaban la impotencia del momento ó en el menor de los casos lamentablemente, la alegría por un pequeño triunfo dentro de tanta derrota.

Esta vez decidí no escribir sobre lo ocurrido el 23N, no porque no me alegrara sino porque para mi todavía el capitulo no se ha cerrado. A solo horas de las elecciones vimos como Chávez saltó a dar una rueda de prensa desestimando el triunfo opositor y dando claras muestras de lo que vendrá como retaliación.

La oposición sin duda triunfó en espacios importantes, pero necesita todavía sentarse y evaluar egoísmos existentes que Chávez creo conoce mejor que ellos y que sin duda utilizará para perjudicar a futuro. El pueblo que voto por el candidato de oposición ó contra Chávez espera resultados, espera que en realidad la oposición le ofrezca mejores soluciones que el chavismo, espera un gobierno.

Con esto no digo que la celebración no es valida, lo que digo es que quizás tengamos que escuchar el consejo de Chávez –aunque esto suene incoherente- y administremos bien este triunfo.