RARE

Monday, December 10, 2007

El Cantante




Repasar la vida de cualquier ser humano en escasas dos horas es imposible, mucho menos si esa vida es la de Héctor Lavoe. El Cantante de los Cantantes, aquel que como se muestra en la película, llegaba tarde a las presentaciones e insultaba al publico de una manera que solo a él se le permitía.

Héctor llega a NYC a encontrarse con la fama, con la Fania y con los excesos que las anteriores brindaban. Su voz le permitió hacerse el dueño de la escena y el publico le permitió el resto. La Voz hizo llave con Willie Cólon y después del puño y letra de Rubén Blades se inmortalizo con el tema El Cantante.

Muchas son las historias, la película solo muestra algunas, quizás las mas oscuras aunque a veces como en toda tragedia sale a relucir el humor, ese humor que también se le acredita a Hector.

Y nadie pregunta
Si sufro si lloro
Si tengo una pena
Que hiere muy hondo


Hector muere en NYC el 29 de Junio de 1993 debido a complicaciones causadas por el SIDA, enfermedad causada por su abuso con las drogas. Muere solo y sin dinero, quizas una de las muertes mas sentidas por los fanaticos del genero musical.

Para esa fecha su amigo Wille se encontraba en España, y publica las siguientes líneas.

El jibarito de machuelito, cerca de la cantera de Ponce, el espíritu de borinquen y de los barrios pobres de toda América.

El "aguazaque" de noventa libras que llego a los nuevayores para fajarse con los bravos, aquel muchacho que aplico los cantos de Gardel, ramito, Edilio, los rosarios de la cruz, agregándoles la malicia de cheo y maelo, dándole una voz a ese vació desolado, enajenado , que los de la banda ya no podíamos cruzar .

Héctor Juan Pérez se transformo en una persona llamada Héctor lavoe para poder cumplir una misión que poco a poco se convirtió de un crucero de placer a un desafió contra mar y marea.

Graduado en la universidad del refraneo con altos honores, miembro del gran circulo de los soneros, poeta de la calle, maleante honorario, héroe, mártir de las guerras "cuchifliteras" donde batallo valientemente durante muchísimos años.

Los capitanes de la "mandinga" lo respetaban, por eso lo bautizaron "el cantante de los cantantes".

Los "beginners" le temían. Cuando se trataba de labia, Héctor Lavoe era un bravo. En cuestiones de negocio, amor y amistad, no lo era. El pueblo fue cómplice en esta tragedia. Héctor le podía mentar la madre a todo el mundo y el público se reía. Lo malcriaron.
La historia de Héctor Lavoe está llena de traiciones y desengaños. El jibarito good looking que volvía a todas las mamises locas quería también ser un malote de barrio. Con el tiempo los “regalitos” de sus “amigos” de traqueteo se convirtieron en gruesas y pesadas cadenas. Este fallo repercutió en una serie fatal que al final nos llevó a ese muchacho que le cantó al Todopoderoso con todo su corazón.

La traición fue el pago que muchos dieron a Héctor, la comunidad latina que nunca le ayudo en sus tragedias cuando reclamamos de su ayuda para defenderlo contra la explotación, los empresarios que vendieron y revendieron su música sin pagar regalías, disqueros que siguen viviendo como jeques sauditas vendiendo sus discos y revendiéndolos en CD sin pagar regalías, mientras Lavoe quedó lánguido en su pobreza; promotores que le ofrecían migajas para poder vender boletos a sus espectáculos donde exhibían a “El Cantante de los Cantantes” en su agonía; impostores tratando de reclamar la carrera y la memoria de Héctor Lavoe como propiedad personal; y el mismo willie, yo que también lo traicione por no tener valor de verlo en aquella condición.

Héroe, maestro, compañero, hoy América latina llora por ti, héroe de la gente pobre, victima de las amenazas que están acabando con nuestro pueblo, mártir de la salsa, el monstruo que ayudaste a crear...

PERDÓNANOS HÉCTOR !

No comments: